Con el apoyo de profesores y del Centro Científico Tecnológico de Valparaíso, buscan contribuir a la eficiencia y sostenibilidad de los huertos escolares de la comunidad educativa.

“Todo lo que los niños plantan y trabajan durante el año se seca y se pierde, porque no tenemos cómo venir a regar”, señala el director de la Escuela Básica Las Palmas de Llay LLay, Héctor Rauld, sobre los huertos escolares que han implementado el establecimiento. El proyecto educativo, comenta, está estrechamente ligado al cuidado del medioambiente, pero la escasez de agua y las altas temperaturas de la zona constantemente imponen grandes dificultades.
Ante esta problemática, estudiantes de la Universidad Técnica Federico Santa María, de la sede Viña del Mar, se propusieron desarrollar un sistema automatizado de regadío, como una solución sostenible y ambientalmente responsable frente a la falta de recursos hídricos.
“Nuestro proyecto busca aportar en una comuna que enfrenta hoy una severa escasez de agua. Para ello, formamos un equipo multidisciplinario de estudiantes de las carreras de técnico universitario en Química, mención Química Analítica, y técnico universitario en Telecomunicaciones y Redes, con el objetivo de apoyar a la comunidad midiendo la calidad del agua y, al mismo tiempo, automatizando un sistema de riego”, explica Naya Chambe, estudiante de Química Analítica y jefa del proyecto.
Sobre el proyecto
Evaluar que el agua cumpla con los parámetros necesarios de riego mediante análisis e instrumentaciones será parte de las labores a realizar por los alumnos del campo químico. Paralelamente, el área de telecomunicaciones se encargará de implementar un sistema de sensores de humedad, que abrirá o cerrará las válvulas de riego según las condiciones del entorno.
Para su ejecución, un comité de profesores de la casa de estudios guiará las distintas etapas del proyecto. Junto con ello, el Centro Científico Tecnológico de Valparaíso (CCTVal), también perteneciente a la USM, participará como socio estratégico durante todo el proceso.

“Esta iniciativa requiere de sistemas electrónicos que deben ser diseñados, instalados e implementados, y al mismo tiempo, de la evaluación de procesos químicos del agua. Nuestra experiencia nos permite aportar no sólo conocimiento técnico en estas tareas, sino también personal de ingeniería e instrumentación con el fin de maximizar el impacto en la comunidad”, señala Diego Castro, coordinador del área de Procesos Industriales de CCTVal.
Desde la Escuela Las Palmas, valoran esta iniciativa por el beneficio directo que les otorgará el proyecto. Actualmente, las plantaciones y árboles que los estudiantes cuidan durante el año son regados con mangueras abastecidas por el sistema de Agua Potable Rural (APR), lo que no puede realizarse en períodos de receso, afectando la continuidad de los huertos y el uso eficiente de los recursos.
Para el director Rauld, la propuesta “tiene un alto valor, porque nos permite mantener aquello que nuestros niños están cultivando y, además, nos ayuda a resolver problemas que nosotros no podemos por falta de recursos, tiempo y herramientas”. En esa misma línea, el docente añade que “el intercambio con la universidad es un gran beneficio e impacta de forma positiva con su conocimiento”.
La implementación de esta iniciativa está proyectada para julio e incluirá el levantamiento de necesidades, la elaboración de una hoja de ruta y el desarrollo de un prototipo funcional. Además, se realizarán talleres sobre análisis de agua dirigidos a la comunidad escolar.
Este proyecto es financiado por el II Fondo Concursable para Iniciativas Departamentales de la Dirección General de Vinculación con el Medio de la Universidad Técnica Federico Santa María, orientado a impulsar propuestas que mejoren la gestión y el control del agua en escuelas rurales de la región de Valparaíso.